Bobby Lay Bobby Lay

Bobby Lay

Timor Global

Una gran oportunidad para un país pequeño: Creando el futuro de Timor Oriental a través del café

La comercializadora Timor Global fue fundada en 2005, descubriendo las posibilidades del café de Timor Oriental, es pionera en la producción de café y la exportación de granos verdes. Obtuvo una licencia del gobierno y regeneró 3,000 hectáreas de tierras agrícolas abandonadas, además también posee uno de los beneficios húmedos más grandes en su país.

Inicialmente producía solo café comercial. Sin embargo, a través de la capacitación técnica y la mecanización de los procesos con los pequeños productores, se mejoró la calidad y la productividad, y el café de especialidad ha llegado a representar más del 50% del volumen de producción. A pesar de enfrentar varios problemas como la situación política y la pobreza, Bobby Lay, uno de los miembros fundadores y director general de la empresa, dice positivamente: “Estoy disfrutando de la situación actual” ¿Cuál es el futuro que imagina Bobby para el café en este que es el primer país nacido en el siglo XXI?

En el mundo del café por casualidad

Los expertos del café probablemente sepan que la variedad Catimor es una cruza entre la variedad Caturra y un híbrido de Timor. Un híbrido de Timor es un híbrido natural entre Arábica y Robusta. Fue descubierto en 1920, se extendió por todo el mundo en la década de 1950 y se dice que desempeñó un papel importante en la supervivencia de las regiones productoras de café. Como su nombre lo sugiere, el actual Timor Oriental es el lugar de su descubrimiento.

Se dice “el actual” porque Timor Oriental fue una colonia durante siglos. Timor Oriental, que fue territorio portugués hasta 1974, declaró su independencia en 1975, pero poco después fue anexado por Indonesia. En agosto de 1999 se celebró un referéndum de independencia, sin embargo, el 75% de la población se convirtió en desplazada interna debido a incendios, saqueos, etc. por parte de grupos de oposición. Se considera que, en ese momento, más del 70% de la infraestructura fue destruida.

En octubre de ese mismo año, se estableció “La Administración de Transición de las Naciones Unidas para Timor Oriental”. En 2002, se convirtió en un país independiente después de que la Organización de las Naciones Unidas dirigiera la construcción de los cimientos de la nación. Sin embargo, en 2006, una manifestación de soldados que se convirtió en un motín provocó que alrededor de 150,000 personas huyeran del país. La asistencia para la reconstrucción continúa hasta el día de hoy por parte de las ONG de otros países y países desarrollados.

El padre y el tío de Bobby son chinos migrantes, quienes tenían un negocio de exportación de café en Timor Oriental durante el período colonial portugués. Bobby nació en Timor Oriental durante esa época, pero pronto quedó bajo el dominio de Indonesia, por lo que, a la edad de 14 años, se mudó junto con su familia a Australia.

La conexión entre él y el café nació en 1999, cuando se independizó. Todo comenzó cuando él y su primo regresaron a su ciudad natal para recuperar las tierras que habían perdido durante el gobierno de Indonesia.

“Mi forma de vida y mis valores estaban arraigados en Australia, por lo que no estaba familiarizado con la vida en Timor Oriental y nunca imaginé vivir aquí. Regresé a casa por azares del destino y no tenía ningún objetivo en particular. Sin embargo, el procedimiento para la recuperación de las tierras tomó más tiempo de lo que esperaba, y pasó el tiempo sin que yo estuviera haciendo nada”.

“Después de eso, comencé a pensar que, si ya había regresado, debería dedicarme a algo. El único producto de exportación que destacaba en ese momento era el café, y también contribuyó el hecho de que mi padre y mi tío quisieran que nosotros, sus hijos, nos hiciéramos cargo del negocio familiar”.

Después de trabajar como comprador en Singapur, Bobby inició un negocio junto con un amigo, donde vendían café a corporaciones multinacionales. A través de ese negocio, conoció a una persona que había estado manejando café de Timor Oriental por más de 20 años y formaron una sociedad. Después se les unió otra persona de Singapur y en 2005, iniciaron Timor Global entre los cuatro. Se convirtió en la primera empresa extranjera aprobada por el gobierno de Timor Oriental.

Desde su independencia, Timor Oriental ha enfrentado el desafío de romper con la economía de monocultivo extremo que depende en gran medida del petróleo y el gas natural para obtener ingresos. Bobby y sus socios también tenían consciencia de este problema.

“Teníamos un fuerte deseo de desarrollar a Timor Oriental. El café es el producto agrícola más importante y no hay ninguna otra cosa que pueda igualarlo. Consideramos que había oportunidad para crecer dependiendo de cómo lo hiciéramos”.

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Photo: WFP/Denita Baptista

Sin salud, no se puede producir café

No es que desde el principio Timor Global se haya centrado en exportar café. Timor Oriental, que es uno de los países más pobres de Asia, tiene un PIB nominal per cápita de $1,754 dólares (2021), siendo la economía número 155 en el mundo, por lo que reducir la pobreza y la desnutrición era un tema urgente.

Por ello, en 2010 iniciaron un proyecto para distribuir alimentos altamente nutritivos a mujeres embarazadas y niños menores de cinco años. Utilizando como materia prima maíz y soja de Timor Oriental adquiridos por el PMA (Programa Mundial de Alimentos de la ONU), fabricaban y procesaban alimentos enriquecidos con vitaminas.

“Si la gente de la comunidad tiene suficiente comida, la calidad de su trabajo mejora, y como resultado, los problemas de la comunidad tienden a mejorar. Somos la única empresa que ha construido una fábrica a petición del PMA. Por su puesto que el proyecto es una actividad comercial, pero nuestra principal motivación fue apoyar a la comunidad”.

También alentaron a los productores a cultivar konjac en sus fincas de café. Además de diversificar sus fuentes de ingresos, también tenían como objetivo asegurar alimentos temporales en preparación para las crisis alimentarias. Además del konjac, también les aconsejaron cultivar maracuyá, pimienta y frijoles.

También enfrentaron una dura realidad con la producción de café, que es el pilar del negocio. Lo mejor es el cafeto. En Timor Oriental, no se acostumbra a podar los árboles y es común llegar a la temporada de cosecha en estado silvestre. La altura había crecido hasta 4-8 m, que es 2 a 3 veces la altura normal. Cuando los nutrientes se esparcen a ramas innecesarias, se reduce el rendimiento.

Los productores, no conocían la importancia de podar los árboles, y tenían la idea de que cortar las ramas reduciría el rendimiento y, por lo tanto, sus ingresos. Hemos estado abogando por esto desde hace algún tiempo, pero recientemente el gobierno ha tomado medidas serias para restaurar la productividad de los árboles viejos y los productores han estado trabajando duro durante los últimos años. Al cortar y zoquear los tallos viejos para estimular el crecimiento de nuevos brotes, los productores obtienen $320 dólares por cada hectárea.

Además, muchos productores practicaban la “recolección de tiras”, en la que todas las cerezas de una rama se recolectan en el momento de la cosecha, independientemente de su madurez. Haciéndolo de esa manera, las cerezas maduras resultan ser menos de la mitad de la cosecha total.

La gestión adecuada de la producción genera beneficios a largo plazo

Bobby ha guiado a los productores para que se concentren específicamente en la cosecha y el procesamiento. También les han dado soporte prestándoles sin costo máquinas trilladoras a grupos de productores y apoyándolos para introducir micro beneficios para incrementar la productividad. Pero no fue fácil para los productores adoptar esa nueva forma de pensar.

“Tomemos como ejemplo la gestión de la producción. Muchos productores intentan producir la mayor cantidad posible de pergamino seco, creyendo que su venta les generará mayores ingresos. Pero no se detienen a ver el lado negativo. Las cerezas quedan en espera durante mucho tiempo debido a la falta de equipo suficiente y otros factores, y la fermentación avanza. Yo les digo: que debemos asegurar un espacio de secado y colocar una cantidad adecuada”. 

“También les explico que vender el pergamino húmedo también es una opción. En el caso de lugares con mayor altitud, el pergamino seco puede tardar de 3 a 4 semanas para estar listo, pero el pergamino húmedo se puede vender cada 1 o 2 días. El margen de ganancia puede ser menor, pero la tasa de rotación es mayor y si se combinan los dos, podrían generarse mayores ganancias a largo plazo. Es necesario que ellos entiendan esta lógica”.

Otro cuello de botella para la producción es la complejidad de la propiedad de la tierra. En Timor Oriental, los agricultores y los propietarios de la tierra son distintos y, en muchos casos, los propietarios no han regresado a sus tierras desde la independencia. Como resultado, aún continúa la “ocupación ilegal” de hecho de los productores. No hay problema en el caso del uso como tierras agrícolas comunitarias, pero existe un riesgo potencial de conflicto.

La red de transporte de café tampoco es confiable. En Timor Oriental, se considera que el 30% de los productos agrícolas nunca llegan al mercado debido a la mala infraestructura y las malas condiciones de las carreteras. Esto es fatal para los productores.

“Incluso si llega, no será a tiempo. Tarda al menos 4-5 días en llegar a nosotros, tiempo durante el cual la calidad se deteriora. También el hecho de que la tarifa de envío sea muy alta es una condición adversa”.

Independientemente del estado de desarrollo del país, no hay duda de que es un lugar adecuado para la producción de café. A partir de 2009, Timor Global comenzó a producir cafés de especialidad con la técnica Sumatra (Wet hulled) y de proceso lavado. Querían diversificar sus ingresos sin dejar de producir café Arábica y Robusta comercial. Alrededor de 2016, también empezaron a probar con los procesos natural y honey, y ahora más del 50% de su producción es café de especialidad.

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Photo: My Linh Le

Reactivar a Timor Oriental junto con los productores

Los esfuerzos de los productores y de Bobby han dado resultados y poco a poco la alta calidad del café de Timor Oriental se está dando a conocer dentro de la industria. Bobby dice: “En las exhibiciones, la reacción de las personas que lo beben es sorprendentemente buena”. Con el creciente interés en los productos orgánicos en todo el mundo, el hecho de que el café de Timor Oriental no use pesticidas ni fertilizantes químicos también es un gran atractivo. Por ley está establecido que el café debe ser cultivado orgánicamente.

También hay un cambio en las aspiraciones de los productores. Ante el creciente número de personas que quieren tener su propia máquina trilladora, este año se cambió el sistema de alquiler a un sistema de compra. Es un sistema en donde se descuenta el monto de la compra de la máquina trilladora de las ganancias de las ventas del café y, una vez pagado en su totalidad, pasa a ser de su propiedad.

“En los últimos años, han incrementado los grupos de productores que adoptan un enfoque más especializado para la cosecha y el procesamiento. También han aumentado sus ingresos y se han convertido en un referente para otros productores”.

“De los aproximadamente 1.3 millones de personas que viven en el país, el 30-40% depende del café para su sustento. Nuestro trabajo es aumentar la conciencia sobre el café de Timor Oriental y generar la mayor cantidad posible de personas que puedan independizarse a través del café”.

Por otro lado, el volumen de producción aún es pequeño, 7,500 toneladas en 2020. En el mercado internacional, en ocasiones se clasifica como café de Indonesia (aproximadamente 770,000 toneladas en 2021). De hecho, algunos de los socios comerciales de Timor Global lo distribuyen como café de Indonesia.

“Durante el dominio portugués (1974), cuando mi padre exportaba, se producían entre 50,000 y 70,000 toneladas. Ahora las condiciones laborales son diferentes a las del período colonial, por lo que es difícil hacer una comparación simple, pero creo que estamos 5 o 10 años detrás de la condición que había imaginado. Nuestro objetivo es hacer mejoras significativas en los próximos cinco años”.

“Nosotros también tenemos que captar las tendencias del mercado y los precios y retribuir a los productores. Además, todavía hay variedades de Timor Oriental que no son conocidas. Si podemos comercializarlas, creo que podemos agregar más profundidad al perfil de cata”.

El reciente establecimiento de la East Timor Coffee Association (ACTL) ha puesto a disposición de todos, la información sobre técnicas de procesamiento y precios en el mercado. Este movimiento también contribuye a una mayor motivación de los productores.

“Timor Oriental es un país pequeño, pero de interés internacional. Los últimos 10 años ha estado estancado debido a la inestabilidad política y otros factores, pero una vez que el país se estabilice, se desarrollará a una velocidad muy rápida. Esto es porque tiene una ventaja geográfica al estar ubicado entre países de la ASEAN como Australia, Nueva Zelanda e Indonesia”.

Han pasado más de 20 años desde que Bobby, por azares del destino, regresó a su ciudad natal. ¿Qué piensa él acerca de esa decisión?

“Yo también a veces me pregunto ¿Por qué elegí este camino? Ciertamente es difícil vivir y trabajar aquí. Pero en general, disfruto de mi trabajo y de mi vida. Para poder contribuir a mi país, siempre pienso en que quiero reactivar a Timor Oriental. No sé si el café es mi destino, pero para mí es algo que me permite cumplir mis metas. Por ahora solo me queda dar lo mejor que puedo y seguirme esforzando”.

Texto: Takuya Takemoto